Psicólogo Jonathan Ricardo Flores Ahumada.

El modelo médico actual se centra en intervenir cuando los síntomas o las enfermedades han aparecido, la intervención se realiza mediante fármacos o cirugías. Basta con observar simplemente un comercial en donde se vende un antiacido a una persona que se dispone a comer un banquete de alimentos insalubres, más allá de enfocarse a prevenir mediante una adecuada alimentación el enfoque publicitario se centra en “haz lo que quieras, tenemos un medicamento para remediar tus problemas”, aunque esos remedios solo tengan un “funcionamiento” temporal. De esta manera es que te propongo que analices la posibilidad de implementar una serie de modificaciones sútiles que traeran calidad a tu vida y potencializarán tu actividad cerebral. COME DE CINCO A NUEVE RACIONES DE FRUTAS Y VERDURAS AL DÍA. Los flavonoides contenidos en diversas frutas y verduras previenen y reparan el daño a las celulas cerebrales, mantienen y mejoran la memoria. Los aminoacidos, vitaminas, minerales, grasas y

Cuando las cosas han salido del control de la persona que está experimentando celos ha llegado el momento de tomar medidas aún más desesperadas, en ese contexto es cuando se pronuncian palabras radicales: “o esa persona o yo”, “debido a la pérdida de confianza que tenemos he decidido terminar la relación”. Este error denominado “el ultimatum” consiste en que la persona que está celosa decide lanzar un amago suficientemente fuerte para que su pareja “se comporte”, este amago incluye terminar la relación, el problema reside en que la p ersona no desea terminar la relación sino que es solo una estrategia para castigar a su cónyuge y esperar a que este regrese arrepentido y en plena disposición a someterse a las nuevas condiciones que su pareja establezca. Cuando se logra el objetivo se vicia la relación ya que se comunica que la relación funciona mediante el chantaje y la manipulación, cuando suceda otro problema se acudirá a la estrategia que ha sido útil, por re

4-      TODO MUNDO SE ENTERA. La persona es movida por una noble intención, desea compartir su sentir y su malestar , más allá de intentar platicar con su pareja y   expresar su sentir, dudas e inquietudes recurre a compartir situaciones que son parte de la intimidad de la pareja. Este es un error pues está señalando algunas situaciones que exhiben a su pareja, los comentarios son negativos y se daña la imagen de la pareja (probablemente amistades y familiares tenían un buen concepto de la pareja), es común que la persona que experimenta celos se vea a si misma como victima de una confabulación entre su pareja y quien le pretende, por tanto su pareja resulta ser un tipo victimario o un complice de las artimañas del pretendiente, es decir, el discurso es una polarización en donde hay buenos y malos. Cabe decir que en estos tiempos en donde buscamos un internet más veloz, cero filas en los bancos y pastillas que contrarresten enfermedades a alta velocidad estamos acostumbrados a la pra

3-El establecimiento del control. En los puntos anteriores ya identificaste al rival, te la pasas hablando mal de él/ella, ahora es tiempo de tomar medidas extremas, decides hacer una supervisión detallada de cada movimiento de tu pareja, ahora haces visitas “sorpresivas” al trabajo, el tema de las llamadas o conversaciones son interrogatorios judiciales: ¿Con quien estabas?,¿qué te dijo?, ¿por qué dijiste esto y no aquello? Hemos llegado al punto número tres de nuestra lista de los cinco errores que cometemos cuando estamos celosos. Cabe destacar que este es uno de los comportamientos que la mayoría de parejas que han perdido la confianza el uno del otro realizan. El establecimiento del control inicia cuando tu pareja realiza un comportamiento reprochable (que no solo puede ser interpretado como reprochable, en algunos casos es real), ante este comportamiento se pasa a un estado de “deuda” en donde tu pareja debe pagar el costo de sus errores y por lo tanto es razonable que