Identifica a las personas tóxicas y huye de esas relaciones

Llega un momento en el que las relaciones interpersonales entran en desacuerdos, lo cual es sumamente saludable para cualquier tipo de relación, es un periodo de prueba para identificar si existe la capacidad de expresar una inconformidad y manifestar la disposición de resolver el asunto para llegar a un acuerdo.
Sin embargo te llegas a sentir muy estresado (a) cada que convives con ciertas personas, la manera en que se comunican contigo, su trato, su sentido del humor más que gratificar se sienten como pequeñas y prolongadas punzadas que se transforman en una constante. Parece que la persona lo toma con naturalidad y sientes que probablemente tú estés exagerando las situaciones, en fin, el asunto es que no te sientes en paz. Estás involucrado en una relación tóxica.
El ritmo de vida tan ajetreado que se vive actualmente es un importante detonador de estrés, así es cómo miles de habitantes que medio durmieron, medio desayunaron, que al menos han ingerido cafeína a primera hora en una vía completamente congestionada por el mar de automóviles que se apresuran a llegar a su destino, se han transformado en bombas de tiempo, personas que van cargando con conflictos, pendientes, sistemas de crianza, percepciones de fracaso y están acostumbrados a ir por la vida en automático, dando esas respuestas automáticas que sólo los mecanismos de defensa pueden dar; racionalizaciones, proyecciones, idealizaciones, devaluaciones, entre otros más.
Una persona tóxica ha desarrollado un alto nivel de neurosis, según Hans Eysenck, la personalidad neurótica se distingue por un bajo nivel de capacidad para entender, aprender y adaptarse a nuevas situaciones de manera eficiente. También les distingue su déficit en el control de impulsos por lo que pueden ser explosivos (neuróticos) o implotar (neurosis psicosomática), en el mismo contexto, la personalidad neurótica es regresiva, en este caso, el individuo prefiere que todo lo que hay a su alrededor se adapte a sus modos, esquemas, expectativas y planes. Esto lo vuelve poco tolerante a la frustración y con una alta necesidad de aprobación.
¿Por qué si estos individuos tienen una alta necesidad de aprobación llegan a realizar comportamientos tan desagradables?
Seguramente te ha pasado que en algún momento, un compañero de trabajo ha hecho un chiste bastante humillante sobre tu persona, en este caso, la persona piensa que su chiste es bastante simpático, desde su perspectiva espera que sus interlocutores aprecien su buen tino, acepten la humillación y estén dispuestos a rendir pleitesía ante su “genialidad”.  La manera en que una persona tóxica regula su autoestima es bajo la premisa “si esto que es desagradable lo toleran, me aman de verdad, si no lo soportan son sujetos despreciables…”.
-Las personas tóxicas no se adaptan a las relaciones, prefieren aquellas relaciones en donde sus amistades son subordinados, cómplices y “patiños”.
-Las personas tóxicas no acostumbran el discurso positivo, prefieren la crítica, todo, absolutamente todo tiene algo malo. La interacción constante con alguien es una queja, un comentario sarcástico o una burla.
-Las personas tóxicas asumen una superioridad, en cada interacción necesitan dar a conocer que los demás no saben lo suficiente o no son tan importantes. De manera diversa manifiestan su desprecio hacia los demás, se refieren a ellos con apodos, adjetivos despectivos y tratos hostiles.  Son personajes que acostumbran a recitar “¿Sabes quién soy yo?”.
-Las personas tóxicas encierran la maravillosa complejidad del ser en adjetivos calificativos, etiquetan a las personas, las reducen a un par de rasgos que comúnmente son negativos.
-Las personas tóxicas no saben disculparse, en este sentido, lo más probable que puedes obtener de ellas es un gran número de justificaciones. No reconocer sus errores es una señal de un “yo” débil.
-Las personas tóxicas son infelices, necesitan sentirse amados, sin embargo no están dispuestos a adaptarse a les necesidades de sus interlocutores, no desean abandonar la vida interior, es más segura que la realidad.
-Las personas tóxicas no controlan sus emociones, abren la boca sin haber reflexionado lo dicho, antes de escuchar ya tienen una respuesta preparada, ante algo que rompe con sus expectativas ya están experimentando síntomas corporales, son impulsivos, se meten en problemas y su mayor limitación es que no pueden retroceder para reparar los daños realizados como consecuencia de sus exabruptos.
-Para las personas tóxicas hay dos tipos de individuos: Los buenos que son sus cómplices, subordinados y “patiños” y los malos, el resto.
-Las personas tóxicas se victimizan, todos aquellos que deciden evadirlos o enfrentarlos son personas terribles, recurren a la polarización.
Una relación constante con una persona tóxica es muy desgastante, te lleva a una inundación hormonal de cortisol, el cortisol genera serios problemas de salud física y mental. (Conoce los efectos del cortisol en el cuerpo)
Ante una relación tóxica:
1-      Aléjate, no permitas más tratos irrespetuosos.
2-      ¿Te sientes herido(a), enojado(a), frustrado(a) debido a los insultos?, recurre a tu círculo íntimo, tu familia, amistades, pareja, ellos te conocen, te podrán dar una retroalimentación adecuada. No olvides las cosas buenas que te distinguen.
3-      Busca asesoría profesional.
 
En redes sociales:
1-      Rodéate de relaciones constructivas y amables.
2-      En primera instancia ignora los comentarios que percibes como ofensivos, la falta de contacto visual en las redes sociales es fuente de malos entendidos.
3-      Si has comprobado la recurrencia de comportamientos ofensivos, no dudes en bloquear a ese contacto.
4-      Recuerda que en las redes sociales es común que se hagan comentarios lesivos, difamantes, amenazas y agresiones subidas de tono, la ley, de cualquier país del mundo, protege el honor y la buena reputación de las personas, implementando mecanismos de defensa para quienes son agraviados por una difamación. No dudes en buscar asistencia legal cuando te encuentres en esta situación o alguna persona filtre tus datos personales en las redes.
 
No olvides perseverar en hábitos saludables, come balanceadamente, ejercítate, nutre relaciones, socializa, acostumbra la amabilidad y reconocer tus errores, de lo contrario estás expuesto a transformarte en una persona tóxica.
 
 
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