3 cosas que hay que aprenderle al campeón del mundial de futbol y podemos aplicar en nuestra vida cotidiana.

Ya hemos mencionado anteriormente el paralelismo simbólico que hay entre el futbol y la vida misma.

Una de las copas mundiales más espectaculares de la historia ha terminado con un digno campeón, determinante y solido desde la portería hasta la banca. Uno habla de la selección alemana y solamente podemos pensar en autoridad, espectáculo, técnica y fortaleza. Pero yo deseo invitarle a reflexionar sobre 3 aspectos muy relevantes que la selección alemana nos muestra y usted y yo deberíamos de implementar cómo filosofía de vida.

 

1-      Tolerancia a la frustración.

Los tetracampeones del mundo pasaron por una racha de oscurantismo y hondo fracaso, fueron la selección que perdió la final en Corea y Japón contra Brasil, aun teniendo al mejor portero del mundo en ese momento, posteriormente fueron eliminados en la Eurocopa del 2004 en la primera ronda, para Marzo de 2006 la FIFA colocó en el ranking mundial a Alemana en el número 22, el más bajo de su historia, su fracaso tocaba los matices más profundos, para el 2006, en su propio mundial comenzaban a demostrar un juego altamente ofensivo, sin embargo no les alcanzó para ganar la copa, fueron derrotados por Italia en la semifinal y obtuvieron el 3er lugar venciendo a Portugal, la Eurocopa del 2008 ya era una clara muestra de la evolución de los teutones, pero fueron frenados en la final por España, en la copa del mundo estas dos escuadras se volvieron a encontrar en las semifinales y la selección Española de la mano de Puyol le propinó la misma dosis. Su técnico fue fuertemente criticado por la prensa, la desesperación llegó a su límite, se le acusaba de tener una selección que jugaba bonito pero que no obtenía absolutamente nada. En la Eurocopa del 2012 volvieron a ser eliminados por los italianos en las semifinales. Hasta aquí el recorrido del fracaso. ¿Qué haría usted hasta este punto? Mucha gente decide hacer monumentos al fracaso, sumergirse en la más profunda superstición y comenzar a victimizarse o a inventar una lógica historia trágica, que si la maldición de tal, que si las injusticias, que si la corrupción de siempre. Mucha gente prefiere dedicar su energía y su tiempo a encontrar explicaciones lógicas a su fracaso con la intención de evadir sus propias responsabilidades. ¿Desea triunfar en algún área de su vida? ¿Está dispuesto a atravesar un largo pasillo de fracaso y profundas dificultades? Alemania lo hizo y aprendió de sus errores, que si su equipo era muy fuerte pero pobre en técnica, que si su selección no había preparado un adecuado relevo generacional, que jugaban muy bien pero no lograban nada, pues Alemania aprendió, toleró la frustración, no mitifico al fracaso, no se victimizó ni le hizo monumentos, no buscó justificar las desilusiones generadas, aceptaron, escucharon, modificaron, experimentaron, aprendieron. Hoy en día tienen una selección fuerte, técnica, contundente, equilibrada entre sus leyendas (Klose) y sus promesas que han madurado. (Müller). Vencieron a sus monstruosos miedos, aprendieron del fracaso y se vencieron a sí mismos, sólo así lograron no solo ganar una copa del mundo, sino hacer historia posicionando al máximo anotador de todos los mundiales, Miroslav Klose, mostrándonos al mejor portero del mundo, Neuer, logrando ser la única selección europea en lograr la hazaña de ganar un mundial en continente americano, llegaron al tetracampeonato, de paso hicieron que Brasil olvidara el maracanazo para que dividieran el trauma con el mineirazo al propinarle una paliza histórica de 7-1 a domicilio del pentacampeón.  ¿Está usted listo para triunfar? ¿Está listo para enfrentar los fracasos?

 

2-      La clave está en la visión a largo plazo.

Mucha gente renuncia a ideas verdaderamente fantásticas debido a que no obtiene los resultados inmediatos. ¿Cuántas veces deja de intentar dormir temprano debido a que el remedio que le recomendaron no hizo efecto instantáneo?, ¿O va pasando de dieta en dieta?, desde la frase de Maquiavelo, hoy en día estamos sumamente centrados en los fines, los destinos y los resultados y no en los caminos, métodos y procesos. Nos fascinan las historias trilladas, nos maravillamos de Steve Jobs, el icono del éxito empresarial, podemos enumerar sus aportaciones tecnológicas y empresariales, pero a su vez desconocemos su proceso, al hombre del garaje, al compañero de Wozniak, al gruñón, obsesivo y perfeccionista que fue despedido de la compañía que el mismo había ideado, Jobs no llegó de manera inmediata, lo hizo respetando su visión, cada día él decidió acercarse a su lejano destino.

De la misma forma sabemos hoy que la selección alemana vivió un largo proceso desde el año 2004 bajo la tutela de Jürgen Klinsmann quien a su vez contaba con la asistencia de Joachim Löw, Director Técnico de la escuadra teutona a partir del 2008, con todo esto hoy sabemos que el proceso de transformación de Alemania fue de 10 años, justo el cálculo estimado por Malcolm Gladwell para los fueras de serie. La lección, aplícate a los procesos, confía, se disciplinado y llegarás a destinos inimaginables.

 

3-      Rodéate de las personas adecuadas, construye un equipo campeón.

Mira a tu alrededor y fíjate quien está ahí acompañándote. La clave de Alemania fue demostrar su equilibrio en el equipo desde la portería hasta la banca, con un equipo poderoso pero disciplinado, una aplanadora que destrozó al equipo brasileño y solo declaró “Tuvimos un poco de suerte, en la final debemos tener los pies en la tierra…” (Palabras de Joachim Löw). ¿Cuántos equipos ante brillantes actuaciones caen en el exceso de confianza? Alemania se concentró y respeto a cada rival, no renunció al estilo de futbol alcanzado, su equilibrio contundente tejido por una maravillosa asociación colectiva en donde bien resplandecían los titulares consagrados como los jugadores que participaban de refresco. Aquí está el meollo del asunto, usted puede ser el mismísimo Leonel Messi, pero si se hace acompañar de un Sergio Agüero que  camina cuando debe de correr, o si se asocia con un Rodrigo Palacio que no es contundente, usted estará en problemas, si, aunque usted sea Messi. La enseñanza de este bello deporte fue precisa, usted puede ser un Messi que no está acompañado de la manera adecuada o un discreto jugador de banca (Schürrle) que sabe hacer equipo con otro jugador de refresco (Götze) para resolver el partido.

Ahora reflexione, si usted es Agüero jugando una final y está caminando, ¡ubíquese!, ¡está jugando el partido de su vida!, ¡es en el aquí y en el ahora!, ¡no hay mañana! Sí usted es Palacio, enfóquese en ser efectivo, no desperdicie las oportunidades. Tal vez usted sea un equipo que aún no alcanza su equilibrio, así veo a Argentina, quien debe sobreponerse, ha cumplido y nos ha deleitado con brillantes y sorprendentes actuaciones de Romero, Mascherano, Demichelis, Enzo Pérez, Rojo, Lavezzi, pudimos mirar destellos de una asociación que debe complementarse entre Di María y Messi, el vacío está adelante, (aún con esos problemas de asociación ofensiva casi derrotan a un poderoso y equilibrado equipo alemán) en un errático Higuain, un dubitativo Palacio y un caminante Agüero, cuando puedan llenar ese vacío ofensivo que hoy no le permite levantar la copa a Argentina, tendremos a un equipo que marcará una nueva era en el fútbol mundial.

Finalmente, mi deseo es que podamos aprender de estos magníficos ejemplos, ahí está el campeonato esperando por usted, vaya por él.